Bebidas de verano: ¿cuál engorda más?
Con el calor se abre la veda de los chiringuitos y las terrazas. ¿Qué podemos pedir para saciar nuestra sed? Pasamos revista a 11 de las bebidas más populares del verano y te desvelamos sus propiedades y calorías.
Nos sentamos en el chiringuito de la playa o en nuestra terraza favorita. Los problemas quedan lejos pero el camarero se acerca. ¿Qué vamos a pedir? Antes de tomar una decisión, lo mejor es saber lo que nos metemos en el cuerpo. Descubre las calorías de las bebidas que tientan tu paladar.
1. Agua mineral
0 Kcalorías (500 mililitros, una botella)
Digan lo que digan los anuncios de la tele, no hay nada como el agua para quitar la sed.
El 96 % del agua embotellada que se vende en España es agua subterránea pura en origen y de composición constante. También hay aguas aromatizadas, con y sin gas.
¿Te gusta el agua con gas? Analizamos las principales marcas para ayudarte a escoger en:
2. Bebidas a base de té
94 Kcalorías (1 lata)
Son refrescos, es decir, bebidas refrescantes con extracto de té. La presencia de aditivos como colorantes o la de aromas tiene como única función suplir la falta de té.
El contenido en cafeína de estas bebidas de té es, de media, la mitad de la que podamos encontrar en una bebida de cola; y 10 veces menos que en una infusión de té.
3. Bebidas de café
169 Kcalorías (envase)
Para quitarnos la sed podemos pasar del genuino café con hielo a los diferentes preparados que nos ofrecen los supermercados.
Además del precio, el aporte calórico de estas bebidas de café varía en función del tipo de leche o la cantidad de azúcar añadido.
4. Granizados
150 Kcalorías (250 mililitros)
Helados de agua y un 12 % de azúcar. Pese a sus atractivas presentaciones, solo son vasos de agua azucarada.
Refrescantes y disponibles en varios sabores, pero con una cantidad ínfima de fruta.
5. Horchata
231 Kcalorías (330 mililitros)
Producto típicamente valenciano elaborado con chufas trituradas, maceradas y mezcladas con agua y azúcar.
Rica en almidón y acido linoléico, tiene un 2,4 % de grasas y un 12 % de azúcares, suponiendo un importante aporte nutricional.
6. Refrescos
132 Kcalorías (330 mililitros, una lata)
Con gas o sin gas, nunca deben sustituir al agua, ya que la mayoría supone un aporte extra de azúcar si los consumimos en exceso.
Los de cola son los más populares, controlando el 52 % del mercado.
¿Te gustan los refrescos? Consulta nuestra información sobre ellos aquí.
7. Zumos
113 Kcalorías (250 mililitros)
No es lo mismo uno recién exprimido (con todas las vitaminas y minerales de la fruta) que un zumo concentrado o un néctar con un porcentaje de fruta (mínimo del 50 %) al que se añade azúcar.
Tampoco es igual comer una fruta que beberse su zumo, ya que la fibra se pierde durante el exprimido.
8. Cerveza
88 Kcalorías (250 mililitros)
Bebida alcohólica obtenida tras fermentar uno o varios cereales (a menudo cebada) y aromatizar con lúpulo.
Lleva en torno a un 5 % de alcohol, menos que el vino, pero bastan dos cañas para dar positivo en un control. Incluso las cervezas "sin" llevan entre un 0,4 % y un 1 % de alcohol. Solo las que se venden como "0,0" carecen completamente de alcohol.
Para que puedas disfrutar de la mejor, analizamos distintas cervezas en nuestro:
Las mejores cervezas sin alcohol
9. Clara con gaseosa
59 Kcalorías (330 mililitros)
Mitad cerveza y mitad gaseosa, menos de la mitad de calórica que la variante con refresco de limón.
La idea de esta combinación es rebajar el alcohol.
10. Clara con limón
125 Kcalorías (330 mililitros)
Mitad cerveza y mitad refresco de limón. Y a la pregunta de si la cerveza con limón engorda, sentimos decir que esel doble de calórica que la variante hecha con gaseosa.
La idea es dulcificar el amargor de la cerveza, pero no hay que olvidar que el refresco con el que se mezcla lleva bastante azúcar, por lo que al final es más calórica que una cerveza.
11. Tinto de verano
125 Kcalorías (330 mililitros)
Vino tinto rebajado con gaseosa, una de las bebidas más populares en los meses de calor.
Combinación dulce, refrescante y con burbujas, pero con tanto alcohol como una cerveza normal.
Nos sentamos en el chiringuito de la playa o en nuestra terraza favorita. Los problemas quedan lejos pero el camarero se acerca. ¿Qué vamos a pedir? Antes de tomar una decisión, lo mejor es saber lo que nos metemos en el cuerpo. Descubre las calorías de las bebidas que tientan tu paladar.
1. Agua mineral
0 Kcalorías (500 mililitros, una botella)
Digan lo que digan los anuncios de la tele, no hay nada como el agua para quitar la sed.
El 96 % del agua embotellada que se vende en España es agua subterránea pura en origen y de composición constante. También hay aguas aromatizadas, con y sin gas.
¿Te gusta el agua con gas? Analizamos las principales marcas para ayudarte a escoger en:
2. Bebidas a base de té
94 Kcalorías (1 lata)
Son refrescos, es decir, bebidas refrescantes con extracto de té. La presencia de aditivos como colorantes o la de aromas tiene como única función suplir la falta de té.
El contenido en cafeína de estas bebidas de té es, de media, la mitad de la que podamos encontrar en una bebida de cola; y 10 veces menos que en una infusión de té.
3. Bebidas de café
169 Kcalorías (envase)
Para quitarnos la sed podemos pasar del genuino café con hielo a los diferentes preparados que nos ofrecen los supermercados.
Además del precio, el aporte calórico de estas bebidas de café varía en función del tipo de leche o la cantidad de azúcar añadido.
4. Granizados
150 Kcalorías (250 mililitros)
Helados de agua y un 12 % de azúcar. Pese a sus atractivas presentaciones, solo son vasos de agua azucarada.
Refrescantes y disponibles en varios sabores, pero con una cantidad ínfima de fruta.
5. Horchata
231 Kcalorías (330 mililitros)
Producto típicamente valenciano elaborado con chufas trituradas, maceradas y mezcladas con agua y azúcar.
Rica en almidón y acido linoléico, tiene un 2,4 % de grasas y un 12 % de azúcares, suponiendo un importante aporte nutricional.
6. Refrescos
132 Kcalorías (330 mililitros, una lata)
Con gas o sin gas, nunca deben sustituir al agua, ya que la mayoría supone un aporte extra de azúcar si los consumimos en exceso.
Los de cola son los más populares, controlando el 52 % del mercado.
¿Te gustan los refrescos? Consulta nuestra información sobre ellos aquí.
7. Zumos
113 Kcalorías (250 mililitros)
No es lo mismo uno recién exprimido (con todas las vitaminas y minerales de la fruta) que un zumo concentrado o un néctar con un porcentaje de fruta (mínimo del 50 %) al que se añade azúcar.
Tampoco es igual comer una fruta que beberse su zumo, ya que la fibra se pierde durante el exprimido.
8. Cerveza
88 Kcalorías (250 mililitros)
Bebida alcohólica obtenida tras fermentar uno o varios cereales (a menudo cebada) y aromatizar con lúpulo.
Lleva en torno a un 5 % de alcohol, menos que el vino, pero bastan dos cañas para dar positivo en un control. Incluso las cervezas "sin" llevan entre un 0,4 % y un 1 % de alcohol. Solo las que se venden como "0,0" carecen completamente de alcohol.
Para que puedas disfrutar de la mejor, analizamos distintas cervezas en nuestro:
Las mejores cervezas sin alcohol
9. Clara con gaseosa
59 Kcalorías (330 mililitros)
Mitad cerveza y mitad gaseosa, menos de la mitad de calórica que la variante con refresco de limón.
La idea de esta combinación es rebajar el alcohol.
10. Clara con limón
125 Kcalorías (330 mililitros)
Mitad cerveza y mitad refresco de limón. Y a la pregunta de si la cerveza con limón engorda, sentimos decir que esel doble de calórica que la variante hecha con gaseosa.
La idea es dulcificar el amargor de la cerveza, pero no hay que olvidar que el refresco con el que se mezcla lleva bastante azúcar, por lo que al final es más calórica que una cerveza.
11. Tinto de verano
125 Kcalorías (330 mililitros)
Vino tinto rebajado con gaseosa, una de las bebidas más populares en los meses de calor.
Combinación dulce, refrescante y con burbujas, pero con tanto alcohol como una cerveza normal.
94 Kcalorías (1 lata)
Son refrescos, es decir bebidas refrescantes con extracto de té. La presencia de aditivos como colorantes o la de aromas tiene como única función suplir la falta de té.
El contenido en cafeína de estas bebidas de té es, de media, la mitad de la que podamos encontrar en una bebida de cola; y 10 veces menos que en una infusión de té.