Avengers: Endgame

Este conmovedor e impactante final de los hermanos Russo sin duda supera cualquier expectativa: Es una conclusión de suspenso y una exploración profundamente emocional de la pérdida y el amor, el deber y el honor, la amistad y la familia. Escrita por Christopher Markus y Stephen McFeely, la historia se centra en los Vengadores que quedaron y cómo sus vidas fueron afectadas a causa del (deadly snap) chasquido de Thanos. Cada uno está afligido por su fracaso, así que cuando empiezan a reagruparse, se nota que están lejos de ser aquellos superhéroes confiados y optimistas que pensaron que alguna vez podrían derrotar a Thanos en Infinity War. Los papás en el grupo son especialmente eficaces a la hora de mostrar lo personal que llega a ser el dolor, en comparación con la sensación general de fracaso y pérdida que siente un superhéroe soltero o solitario. Como el, a menudo subestimado, Hawkeye, Renner brilla en un campo abarrotado de inmenso talento, al hacer que su personaje se sienta central. Su intensidad y su amor platónico y fraternal por Natasha/Black Widow se plasman perfectamente. Johansson realiza gran parte del trabajo de repercusión emocional de la película, vigilando a todos, animando a sus amigos y actuando como la hermana favorita de todos (excepto en el caso de Hulk). La gran Trinidad, Iron Man, Capitán América y Thor, están igual de fabulosos. Sus diferencias nunca habían sido más evidentes, pero cada uno demuestra que, a pesar de los conflictos y desamores del pasado, son dignos y están preparados para luchar codo con codo.

Hay tanto contenido en las tres horas de Avengers: Endgame que a veces, puede ser muy abrumadora; está claro que es una película que incitará a verla varias veces. Hay giros inesperados y momentos divertidos, así como escenas y temas más serios. Los conocedores del Universo Cinematográfico Marvel se deleitarán con las numerosas referencias y el claro fanservice (sí, sigue habiendo un cameo de Stan Lee), mientras que los fans más casuales seguirán encontrando muchos motivos para aplaudir. Lo que también es cierto es que la película, con sus tres horas de duración, ofrece suficientes momentos para que todos experimenten diferentes sensaciones. Justo cuando termina un momento dramático, apenas hay una pausa para un chiste de Tony o Rocket (con la voz de Bradley Cooper) antes de que otro momento "corta venas " te apriete el corazón. Pero no desesperes: Este es un ejemplo agridulce de que los mejores héroes no permiten que la arrogancia o la inseguridad los derroten. Endgame está a la altura de The Lord of the Rings: The Return of the King y Harry Potter and the Deathly Hallows: Part 2: todos son finales de franquicia épicos, emotivos y únicos.