Chef a domicilio

Favreau ha protagonizado y dirigido superproducciones, pero empezó a pensar a menor escala con su gran éxito independiente Swingers; lo más probable es que Chef guste a los fans de esa película. Está impregnada de amor, no sólo por la comida, sino también por el cine. Es una película hecha con pasión y gusto, como debe ser la cocina. El argumento de Chef, repleto de referencias a las redes sociales y a cómo pueden hacerte triunfar o fracasar, es actual, pero en última instancia está hilvanado con un mensaje atemporal sobre cómo encontrar la felicidad.

También es una visión fresca de la paternidad tras el divorcio, sin la melaza habitual. Carl lucha fuertemente por ser un buen padre, incluso mientras hace malabarismos con las presiones de una carrera al borde de la destrucción, un divorcio amistoso pero agridulce, y una gran dosis de inseguridad en sí mismo. Su anhelo de encontrar su equilibrio como padre está tan auténticamente dibujado como su deseo de servir el tipo de comida que siempre ha anhelado cocinar: sencilla y buena. Si hay una queja sobre Chef, es que el final se puede ver a unos cuantos camiones de comida de distancia. Pero no es una gran decepción, sino lo que tiene que ser. John Leguizamo, Robert Downey Jr. y Scarlett Johansson también coprotagonizan... brillantemente.