El psíquico Patrick Jane se une a un equipo especial policíaco para investigar un asesinato doble con el sello de un asesino en serie conectado personalmente con Jane.
Como resultado de un sangriento enfrentamiento, el Departamento del Sheriff de Banshee, son interrogados por un agente especial del FBI.
Proctor logra salir de la cárcel. Mientras Juliet no está y Alex visita la casa de la masacre, la lealtad de Rebecca está en duda.
Jane y Fischer investigan el asesinato en un campo petrolero, mientras Rigsby y Van Pelt se reúnen con el equipo y el FBI para descubrir quién está persiguiendo a los antiguos miembros de CBI.
Patrick es secuestrado y durante la investigación Lisbon y el equipo descubren que casi todo el que ha tenido trato con Jane pudiera tener motivos para querer hacerle daño.