Cuando algún artista se toma un tiempo para crear un nuevo álbum, en general se demora un año o dos. Para Zedd, quien lanzó su último disco en 2015, el proceso fue un poco más largo. “Tardarse demasiado puede ser una desventaja”, comenta el productor a Zane Lowe de Apple Music, al referirse a los nueve años que transcurrieron entre True Colors y Telos, su tercer LP. “Todo depende de lo que quieras hacer. En algún momento, tuve que definir el concepto de este material. Alrededor de 2020, comencé a trabajar en un nuevo proyecto, pero no sabía lo que estaba haciendo en realidad. Pensé que la pandemia me otorgaba la oportunidad para sentarme y hacer música. Sin embargo, no tenía una verdadera inspiración ni un enfoque claro”. De esas sesiones sólo sobrevivió una canción, pero fue suficiente para dar forma a lo que finalmente se convertiría en Telos (término que hace referencia a la culminación de un objetivo según Aristóteles). Zedd comenta que “Dream Brother”, que gira en torno a la voz del fallecido cantautor Jeff Buckley en su tema homónimo de 1994, “era el único track que transmitía la emoción que buscaba”. “La versión original de Buckley siempre ha sido una inspiración para mí, y me pareció que uno de sus aspectos podía cobrar vida en un contexto diferente. Pensé que podría transformarla en una melodía increíble y respetuosa con un toque dance”, afirma. El concepto de “un toque dance” es fundamental para entender Telos y la nueva visión de Zedd de la música tras casi una década entre álbumes. “Hubo un momento en el que decidí que este disco era para mí. Eso cambió todo. Cualquier duda que tuviera sobre cómo incorporar un compás de 7/8 en la música dance no importaba ya que no se trataba del género pues estaba creando sólo para mí, no para mis fans ni para el sello ni para nadie”. A diferencia del rítmico True Colors, en Telos la batería se utiliza para aportar color, tono y dinámica. Aparece brevemente en algunos compases para luego desaparecer, intercambiando su protagonismo con el sintetizador, los riffs de piano y la voz de Bea Miller al comienzo con “Out of Time”, agregando un componente rítmico contundente a la vagamente surasiática “Shanti”. Temas como “Sona”, una colaboración en compás de 7/8 con el trío irlandés-estadounidense the olllam, reflejan un compromiso aún mayor con la composición lo que convierte a Telos en un conjunto cohesivo que invita al público a tomarse su tiempo, tal como él hizo al crearlo. “Puedo hacer una buena canción, pero 10 no bastan para realizar un buen álbum. Crecí con discos que eran mucho más que un conjunto de buenos tracks. Estos materiales aún me inspiran y me han convertido en el músico que soy hoy. Quería crear algo significativo, un álbum que en 30 años pueda inspirar a las nuevas generaciones a dedicarse a la música”.