Kenny G es una de las figuras centrales del subgénero jazzero que se volvió popular por su acercamiento a texturas del funk, el pop y el R&B desde mediados de los 70. Pero G no es un instrumentista cualquiera, su relación simbiótica con el saxo soprano (capaz de hacerlo conseguir el record Guinness de la nota más larga tocada en un saxofón) se hace explícita en su música suave y misteriosa, orientada al brillo de sus recitados melódicos. Desde 1982, ha editado 10 álbumes de estudio y es la gran referencia de un sonido anclado en los 80, sensual, amable al oído y apto para todo público.